Nada más aterrizar o llegar en ferry, te recibiremos para comenzar tu aventura en Tánger, una ciudad que mezcla historia, cultura y modernidad a partes iguales. Conocida como la “puerta de África”, Tánger te enamora desde el primer momento con su ubicación estratégica entre el Atlántico y el Mediterráneo, y sus vistas únicas al estrecho de Gibraltar.
Pasearemos por la Medina de Tánger, donde las calles estrechas nos llevarán entre zocos llenos de color, tiendas de artesanía y cafés con encanto. Visitaremos la Kasbah, situada en lo alto, con su museo y sus miradores, y caminaremos por la Corniche para disfrutar del ambiente costero.
Si el tiempo lo permite, nos acercaremos a las Cuevas de Hércules, un lugar lleno de leyendas y uno de los puntos más fotografiados de la zona. Terminaremos el día con una cena típica marroquí, donde no faltará el té a la menta y los dulces locales.

Tras el desayuno, pondremos rumbo hacia Tetuán, conocida como “La paloma blanca” por sus casas encaladas. Pasearemos por su medina, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, donde se respira un ambiente auténtico y tradicional. Aquí podrás ver talleres artesanales, mercados locales y una arquitectura que mezcla influencias andalusíes y marroquíes.
Después, nos adentraremos en las montañas del Rif, un trayecto lleno de paisajes verdes y vistas espectaculares, hasta llegar a Chefchaouen, la famosa “ciudad azul”. Por la tarde tendrás tiempo libre para recorrer sus callejuelas pintadas de azul, visitar la Plaza Uta el-Hammam y relajarte en alguna terraza con vistas a la medina.
Chefchaouen es un lugar perfecto para sacar fotografías, comprar artesanía local y simplemente dejarte llevar por su tranquilidad. Al caer la noche, la ciudad adquiere una magia especial con su iluminación suave y el murmullo de las fuentes.

Saldremos temprano de Chefchaouen para aprovechar al máximo el día. Nuestra primera parada será Volubilis, una de las joyas arqueológicas de Marruecos y testimonio de la antigua presencia romana. Aquí recorreremos sus mosaicos, arcos y templos, imaginando cómo era la vida hace casi dos mil años.
Continuaremos hacia Meknes, una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos. Conoceremos la impresionante Puerta Bab Mansour, el Mausoleo de Moulay Ismail y la Plaza El-Hedim, donde se mezcla el bullicio local con la historia. Este es un lugar ideal para probar algún dulce marroquí o un zumo recién exprimido.
Finalmente, llegaremos a Fez, donde nos instalaremos en el alojamiento y, si queda tiempo, podremos dar un primer paseo nocturno por su medina, una de las más grandes y antiguas del mundo. Fez te atrapará con su ambiente medieval y sus aromas a especias y pan recién horneado.

Este día estará dedicado a descubrir Fez, considerada la capital cultural y espiritual de Marruecos. Acompañado por un guía local experto, recorrerás la medina de Fez el-Bali, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sus calles laberínticas, llenas de talleres artesanales, tiendas de especias y mezquitas, te transportarán a otra época.

Visitarás lugares icónicos como la Universidad Al Quaraouiyine, una de las más antiguas del mundo, y la Medersa Bou Inania, famosa por su arquitectura de mosaicos y madera tallada. También conocerás los Curtidores de Chouara, donde el proceso tradicional de teñido del cuero sigue realizándose como hace siglos, ofreciendo un espectáculo de colores único.

La ruta incluirá paradas en miradores para contemplar la ciudad desde las alturas y, por supuesto, tiempo libre para pasear a tu ritmo y hacer compras de artesanía local. Al final del día, regresarás a tu alojamiento con la sensación de haber viajado en el tiempo, entendiendo por qué Fez es una ciudad que enamora a todo el que la visita.